Gaita de Furro

Tiene un esquema rítmico de 6x8. Por haber sido el género musical zuliano más difundido a escala nacional, se ha convertido en el más polémico en lo que se refiere a sus orígenes y trayectoria. Se le conoce como Gaita de Furro al canto popular tradicional de nuestro pueblo en la época navideña.

La instrumentación con la que tradicionalmente se ha acompañado a la gaita, está integrada por: Cuatro, maracas, charrasca, tambora y el instrumento básico el furro o furruco, como también se le denomina, conocido antiguamente como “mandullo”, descendiente directo de la zambomba española.

En el Maracaibo de hace unos cincuenta años, se incluían, cuando las condiciones lo permitían, otros instrumentos como el piano e incluso algunos de viento. Hoy en día, la influencia comercial ha determinado la presencia en nuestra gaita de furro de algunos componentes electrónicos.

También cuentan, quienes tuvieron la oportunidad de vivir esa época, que las gaitas se organizaban en las casas de familia o locales comerciales con la participación de todos los asistentes, hombres y mujeres; un pañuelo era la señal que al ser entregado a alguno de los presentes, le indicaba su turno para decir un verso, la mayoría de las veces improvisado, refiriéndose al dueño de la casa, o de la firma comercial, o el tema al cual se dedicaba el estribillo.

La temporada gaitera originalmente estaba comprendida entre la víspera del Día de la Chinita, el 18 de noviembre, este inicio de las gaitas se conocía tradicionalmente como la “Bajada de los Furros” y se prolongaba hasta el 2 de febrero, día de la Candelaria, en el cual tenía lugar la “Subida de los Furros”, es decir se guardaban los instrumentos hasta que llegara nuevamente la fecha de inicio de la temporada.

Gaita Perijanera

Carece de estribillo fijo, siendo este el motivo por el cual un grupo de investigadores no la aceptan como gaita, alegando que es requisito indispensable de ésta la presencia de un estribillo fijo. Su esquema rítmico es de 6x8 ó 2x4.

Se turnan todos los asistentes con "versos espontáneos", son estrofas de cuatro versos octosílabos y el coro se repite el segundo y el cuarto después de que el solista los canta, hombres y mujeres se toman de la mano y hacen círculo alrededor del grupo de músicos, el círculo avanza e incluso se rompe y se hacen diversas figuras entrecruzándose en el transcurso del baile.

Gaita de Santa Lucía

En la Zona Norte del Estado Zulia, concretamente en Santa Rosa de Agua, San Rafael de El Moján, Sinamaica y sitios cercanos, se ha encontrado un canto al cual los habitantes de estos sitios le llaman “Gaita a Santa Lucía”, y le han conocido en esa denominación a lo largo de muchas generaciones. Se canta en modos mayores y según algunos informantes, tradicionalmente se ha cantado acompañada de: cuatro, charrasca, maracas y furro, no habiéndose incluido la tambora sino hasta después de la llegada del “Chimbanguele” (del Sur del Lago) a estos sitios.

En toda la zona norte sólo se ha encontrado el estribillo aquí mostrado:

“Canten muchachos con alegría

Que esta es la gaita de Santa Lucía,

Gloria demos a Santa Lucía”

Los versos, son generalmente improvisados y tienen la característica de que el coro responde al revés a lo que el solista dice, por ejemplo:

Solista: “Los ojitos de Lucía, parecen dos paraparas…

Coro: “Parecen dos paraparas, los ojitos de Lucía…

Se canta en honor de Santa Lucía, generalmente para pagarle promesas, se confeccionan hermosos altares donde se le rinde culto con música y oraciones en un novenario comprendido entre el 12 y el 21 de diciembre, (el día de Santa Lucía es el 13), sin embrago, las gaitas se prolongan más allá de esa fecha.

Gaita de Tambora

Es la evolución del canto de faena femenino (en el pilón, en la piedra de moler, en la tabla lavando en el río, o frente al fogón). Las esclavas eran utilizadas para el trabajo en el hogar, y este canto del trabajo, es canalizado por los valores culturales africanos y logra florecer hasta enfrentarse al urbanismo, quien la reduce a una simple actividad que se realiza una o dos veces al año. Se caracteriza porque presenta una tambora con parche en ambos extremos, sujetos con cáñamo o mecates; y un tamborito igual al medio golpe del chimbanguele. Su compás es de 2x4.

Gaita Tamborera

Llamada por el cronista e investigador Juan de Dios Martínez como "La 5ª gaita", es ciertamente el quinto subgénero de la Gaita Zuliana. Surge a principios de la década de 1970 como resultado de la fusión de la gaita de tambora y los chimbángueles de San Benito. Su creador fue el célebre cantautor gaitero Nelson Martínez de la mano con el Gran Coquivacoa, agrupación gaitera en la cual formaba filas. Su ritmo es de 2x4 y se ejecutó inicialmente con cuatro, furro, tambora, charrasca y maracas. prontamente se le adicionaron el bajo, el piano, la guitarra eléctrica, las congas, el bongó, el cencerro y hasta metales (trompeta, trombón y saxofón) y timbales, por cuanto a finales de los 70 y principios de los 80 la gaita tamborera fue arropada por la influencia musical caribeña, en especial de la salsa, todo ello liderado por los conjuntos gaiteros vanguardistas como Estrellas del Zulia, Guaco, Santa Anita y, por supuesto, Gran Coquivacoa. La temática es variada y no tiene una temporada especial para su ejecución.